La colección de fondos culturales e históricos que gestiona la FEB es una de las más completas y destacadas en el mundo del baloncesto. Una parte representativa de estos objetos y elementos aparece en esta exposición. Cultura y deporte se unen durante todo el recorrido, que ayuda a comprender, en toda su extensión, la importancia del baloncesto mundial en general y del español en particular.
Los orígenes del baloncesto, la selección nacional masculina y femenina y la FIBA con sus competiciones, forman el exclusivo contenido de este recorrido histórico. Y un especial recuerdo para la historia del Campeonato del Mundo, que inició su camino en 1950 en Buenos Aires, y que 64 años después celebrará la primera Copa del Mundo de baloncesto, con Barcelona como una de las seis ciudades sede.
Rodeados de todos estos elementos comienza un viaje a través de la historia del baloncesto que nos permite mostrar que el deporte, más allá de ser solamente juego, es una oportunidad para aprender y disfrutar a través de las diferentes posibilidades culturales que nos ofrece. Un recorrido que se convierte en memoria del baloncesto y su cultura, de su pasado, de su historia, y tiene como interés conservar esa memoria como elemento primordial para seguir avanzando. La FEB, en este caso, trata de preservar, cuidar y ampliar el número de objetos que tiene a su alrededor. Además, se empeña ahora, y para el futuro, en mostrar toda esta cultura deportiva que administra.
Esta exposición no habría sido posible sin la ayuda y colaboración de diferentes entidades. La FEB agradece en primer lugar a la FIBA su colaboración con la cesión de importantes elementos y recuerdos que se pueden disfrutar en esta visita, así como por todo su esfuerzo y deseo de convertir esta Copa del Mundo en la mejor de la historia; al Ayuntamiento de Barcelona por su trabajo en la organización de la ciudad como sede de parte de la fase final del campeonato, así como por la cesión de este espacio, el Museo Olímpico y del Deporte Joan Antoni Samaranch, para la realización de esta exposición; y por último, a la FCB, por estar siempre cercana y en disposición a las actividades de la FEB.
Gracias a todos.
